martes, 2 de octubre de 2012

LO BUENO DE ENCONTRARSE LA TERCERA VEZ QUE SE CAE EL SOMBRERO

(¡¿Qué crees?! No fue la tercera vez, fue la cuarta... peroooo... ese texto  lo lees directo en el libro, ok?)

LO BUENO DE ENCONTRARSE LA TERCERA VEZ QUE SE CAE EL SOMBRERO
(LA PERCEPCIÓN)
La verdad es que el señor iba caminando por la calle y ya se le había caído el sombrero justo junto a un charco cuando lo levantó y lo puso bajo el breve resguardo de la cueva debajo de su brazo, cuando de nuevo se le cayó ahora muy cerca de la mierda de un perro pequeño a juzgar por el tamaño y fue la tercera vez que se encontró aquel señor inclinándose para recoger su sombrero que en lugar de enfado se lo tomó a qué miércoles en domingo con casi una risa abierta; y justo con esa expresión y gesto de sonrisa que camina a risa en el rostro dibujado, fue cuando se encontró con los ojos de aquella mujer, que siempre dijo -durante años- que lo que más le había fascinado de él, era la forma que tenía de reírse frente a lo que otros consideraban diferente. Lo supo desde su encuentro.



Lo bueno
de encontrarse
la tercera
vez
que
se cae
el sombrero.